Posiblemente, de todas las aves que habitan nuestros ríos, el Ánade real o Azulón ( Anas platyrhnchos )sea la más conocida por todos nosotros, sobre todo el macho de la especie por su inconfundible cabeza azulada y a veces tornasolada según la luz y la época del año. Podemos encontrarlas en prácticamente cualquier río o zona húmeda pues su habitat es de lo más variado a excepción de ríos de corrientes rápidas o de alta montaña.
Su presencia siempre es sinónimo de tranquilidad, quiero decir, en un río alborotado o en algunos momentos "demasiado" humanizado será difícil verlas pues se muestran desconfiadas y son las primeras en huir ante la presencia humana. No ocurre lo mismo cuando están en lagos de parques de las ciudades donde se muestran indiferentes y a menudo se acercan mucho para conseguir un pedazo de pan.
El cortejo de estas aves comienza en otoño y siempre es interesante observar las peleas y persecuciones que varios machos realizan para conseguir una hembra. A primeros de año, las parejas ya consolidadas se marchan a sus lugares de nidificación para intetar sacar adelante una puesta que suele oscilar entre los 9 y los 12 huevos de un tono verde grisáceo pálido que después de unos 28 días de incubación (solo por parte de la hembra) eclosionan en un estallido de patitos que seguirán a la madre allá donde vaya.
Como otros ánades, en plumaje de eclipse, una vez acabado el celo, el macho se vuelve muy parecida a la hembra. Esta especie es fácilmente identificable por su espéculo azul púrpura de borde blanco (esa mancha azul que queda visible en los flancos del ave). Queda ensombrecido su estatus salvaje pues durante mucho tiempo fueron criados y deliberadamente liberados para la práctica de la caza.
Su alimentación consiste en pequeños invertebrados acuáticos, semillas, raíces, brotes y vástagos vegetales y granos de aguas someras.
Es el pato, probablemente, más extendido y como he dicho más conocido. Pertenece a la familia de las anatidae y al orden de los anseriformes. De una longitud media de 60 cm, envergadura de 90 cm y un peso que oscila entre los 75 gramos y el kilo y medio. Su longevidad puede llegar a alcanzar los 25 años. Cada vez más extendida por su fácil adaptación al medio.
Salu2
3 comentarios:
muuuu gonitoooo
Preciosas imágenes de este ave tan común pero tan bella.
Eiiiiiiiiii Oscar!!!
Muy merecido reportaje a esta bella anátida. La fotos preciosas ;-)))
Besillos, Isabel
p.d. me alegra saber que estás activo.
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